jueves, 26 de septiembre de 2013

Estimulacion Cognitiva en Alzheimer y otras demencias


¡Hola! El pasado sábado 21 de Septiembre se celebró el día Mundial del Alzheimer. Y para conocer más esta enfermedad fui invitada a dar una charla acerca de” la importancia de la Estimulación Cognitiva en Alzheimer y otras demencias” a la Residencia Ballesol de Salvador Allende en Zaragoza. Esta charla era dirigida a residentes del centro, familiares de los mismos y profesionales vinculados al área de la tercera edad. En esta entrada me gustaría acercaros el tema y que conozcáis como se trabaja las demencias desde la neuropsicología =).

 
Primero vamos a conocer un poco el Alzheimer…

El Alzheimer es la demencia más frecuente en nuestra población. Tres de cada cuatro personas con demencia presentan Alzheimer. Suele aparecer a partir de los 65 años, sin embargo, hay casos en los que puede aparecer a una edad más temprana. Como bien sabéis, es un trastorno neurodegenerativo que cursa con un deterioro progresivo de las funciones cognitivas. Principalmente la memoria es la más afectada. Ya desde primeros estadios se identifican pequeños fallos de memoria y una dificultad para adquirir nuevas informaciones. Posteriormente los problemas de memoria se van agravando y comienzan a surgir otras dificultas cognitivas como afasia, agrafia, agnosia, dificultades en las funciones ejecutivas…Lo que impedirá a la persona afectada desarrollar normalmente las actividades de la vida diaria. Finalmente la persona se volverá totalmente dependiente del entorno. Hay que tener en cuenta que en los primeros años de enfermedad estas personas no suelen ser diagnosticadas y pueden pasar años hasta que acudan al medico y obtengan el diagnóstico de Alzheimer. Por ello, es muy importante, que para una correcta atención y cuidado exista una detección precoz del trastorno, de manera que mediante tratamiento farmacológico y no farmacológico se pueda retrasar las consecuencias de la enfermedad y se le una mejor calidad de vida a la persona. La duración media de la enfermedad se sitúa entorno a los 12 años de evolución.

Las causas del Alzheimer se consideran múltiples y aún no están muy claras.Podemos hablar de factores neuroquímicos que afectan al funcionamiento cerebral, como la presencia de beta-amiloides, la perdida neuronal o la formación de las placas seniles. También se ha observado que ciertos cromosomas (14, 19 y 21) están relacionados con la presencia de Alzheimer. Por último, la atrofia de áreas cerebrales de los lóbulos frontales, parietal y temporal, así como un ensanchamiento de los surcos cerebrales también influirían en el desarrollo de éste.

¿Cómo se trabajan las demencias?


 

A partir de la estimulación cognitiva podemos reducir las consecuencias de la afectación y retrasar la aparición de la enfermedad. ¿Cuál es el objetivo que persigue la estimulación cognitiva?

 

  1. Estimular o mantener las capacidades mentales
  2. Evitar la desconexión del entorno y fortalecer las relaciones sociales
  3. Dar seguridad e incrementar la autonomía personal del paciente
  4. Estimular la propia identidad y autoestima
  5. Minimizar el estrés y evitar reacciones psicológicas anómalas
  6. Mejorar el rendimiento cognitivo y funcional
  7. Mejorar el estado y sentimiento de salud
  8. Mejorar la calidad de vida del paciente y de los familiares

La estimulación cognitiva no consiste sólo en realizar ejercicios repetitivos y carentes de sentido sino que se trabajan funciones muy importantes para el desarrollo diario de la persona afectada, manteniendo así su autonomía y su bienestar físico, psíquico y social. Por ejemplo:

·         Trabajamos las funciones mentales superiores: memoria, lenguaje, atención, percepción y funciones ejecutivas.

·         Trabajamos a nivel psicomotor: coordinación, equilibrio, tono, habilidades de la vida diaria…

·         Trabajamos las alteraciones conductuales y emocionales: reducimos la apatía, incrementamos la motivación, reducimos el llanto y la labilidad emocional, mejoramos el estado de ánimo, reducimos la irritabilidad y las conductas disruptivas.

·         Trabajamos las relaciones sociales: comunicación, autoestima, compañerismo, ayuda…

 

Cuando hablamos de estimulación cognitiva….¿En que nos basamos?


 

Existen dos teorías principales que sustentan la importancia de la estimulación cognitiva, la plasticidad cerebral y la reserva cognitiva. La primera de ellas se basa en que el cerebro tiene la capacidad de adaptarse a las demandas  y reorganizar las conexiones cerebrales tras una alteración o lesión cerebral. De esta manera, mediante la estimulación cognitiva potenciamos este proceso de plasticidad cerebral, activando el cerebro y haciendo que la pérdida causada por la demencia sea menor y la persona sea lo más autónoma posible el mayor tiempo posible. La otra teoría, la teoría de  la reserva cognitiva, se basa en que durante nuestra vida hemos tenido unas vivencias personales y ambientales que nos permiten adquirir habilidades que después, ante una fase de demencia, usaremos para compensar los déficits. Esto quiere decir que cuanto más estimulemos nuestro cerebro más habilidades de compensación tendremos ante la demencia y más tarde aparecerán los síntomas de la enfermedad.

 

 
¿Cómo adaptar la estimulación cognitiva al paciente con demencia?

 

A la hora de plantear un programa de estimulación cognitiva será necesario una evaluación previa que nos permita conocer el estado cognitivo general de la persona afectada, de manera que el programa pueda ser lo más personalizado posible a las necesidades del paciente.

Además será muy importante el contacto y asesoramiento con la familia, de manera que la comunicación entre neuropsicólogo y familia sea muy fluida y con pautas deintervención.

 

 
¿Sólo es necesaria la estimulación cognitiva para personas con demencia?

 

No, como se ha visto cuanto mayor reserva cognitiva, cuanto más estimulemos y trabajemos con nuestro cerebro mejor para nuestra salud, de manera que retrasemos la posible demencia. Además como hemos visto no sólo se trabaja el cerebro, también se trabajan las relaciones sociales y el bienestar.

 

 

 

Para finaliza acompaño la entrada señalando las conclusiones de un estudio del año 2010 donde, tras revisar 179 artículos, se concluye que la estimulación cognitiva (Olazaran, J., Reisberg, B., Clare, L., Cruz, I., Peña-casanova, J., Del Ser, T., Woods, B., Beck, C., Auer, S., Lai, C., Spector, A., Fazio, S., Bond, J., Kivipelto, M., Brodaty, H., Rojo, J.M., Collins, H., Teri, L., Mittelman, M., Orrel, M., Feldman, H.H., & Muñiz, R .2010)

 

 

Ø  Retrasa la institucionalización

Ø  Mejora de las habilidades específicas entrenadas: atención, memoria, lenguaje y orientación.

Ø  Mejora las actividades de la vida diaria.

Ø  Sesiones grupales de estimulación cognitiva, reminiscencia y relajación provocaron una mejora en la orientación al de tres meses de comenzar el tratamiento.

Ø  Mejoras conductuales y disminución del aislamiento

Ø  Mejora de síntomas afectivos al de un años de comenzar la estimulación cognitiva.

Ø  Importancia del asesoramiento e información al cuidador/es para la mejora del estado de ánimo de estos y el retraso en la institucionalización del familiar afectado de EA.

 

 

¡Creo que por hoy es suficiente! Si estáis interesados en acudir a sesiones de estimulación cognitiva no dudéis en poneros en contacto con MartinezBardaji Psicología, solucionaremos todas vuestras dudas.

¡Un saludo a tod@s!

 

 

lunes, 16 de septiembre de 2013


¡Hola! Me llamo Sarai García y hoy comienzo un nuevo camino formando parte del equipo del Gabinete Martínez Bardaji Psicología y Salud en Zaragoza como neuropsicóloga. Muchos habréis pensado “¿Neuropsicologa? ¿Qué es eso?”. No os preocupéis, cuando comencé la carrera de Psicología yo tampoco sabía lo que era, sin embargo a día de hoy, es mi mayor pasión.

 


A modo introductorio comenzaré diciendo que la neuropsicología trabaja con personas que han sufrido algún tipo de lesión cerebral sea de tipo congénito como en los  Trastornos del neurodesarrollo (trastornos del aprendizaje -dislexias, discalculias…-, trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad, parálisis cerebral, autismo, síndrome de Asperger, retraso mental…) o de tipo adquirido (Ictus, traumatismos craneoencefálicos, tumores cerebrales…). Así mismo también se trabaja con otras enfermedades que cursan con alteraciones cognitivas, como son la esclerosis múltiple, las demencias, la esquizofrenia…

Todo cambia…

Si miramos a nuestro alrededor, seguro que conocemos a alguien que presenta alguno de los trastornos anteriores. Si nos fijamos bien, veremos que las personas que han sufrido o sufren alguno de estos trastornos puede presentar dificultades en la atención, la memoria, el lenguaje, la percepción…Incluso en los casos de daño cerebral adquirido la personalidad y las conductas de las personas afectadas pueden presentar grandes diferencias entre el antes de la lesión y el después. Y es que tras una alteración o una lesión cerebral hay siempre unas secuelas no sólo de tipo neuropsicológico sino también emocionales y conductuales. Desde neuropsicología es muy importante evaluar todas las secuelas para, posteriormente, plantear una rehabilitación neuropsicológica adecuada a las necesidades del paciente y con el objetivo de que éste logre la mayor autonomía y bienestar posible.

Además del paciente afectado, la familia tiene un papel clave. Si nuestro hijo presenta una discapacidad psíquica o nuestro marido ha sufrido una lesión cerebral, nuestras expectativas y nuestro estilo de vida previo se verán afectadas. Será necesario un proceso de adaptación a esta nueva situación. Para ello, el trabajo con la familia también es muy importante en neuropsicología.

 A lo largo de las entradas del blog, me iré introduciendo más en estos temas con el objetivo de  que vayáis conociendo el trabajo del neuropsicólogo y descubráis un poco más el cerebro, las emociones y la conducta humana.

 Ya solo me queda agradecer enormemente a @Arantxa Martínez Bardají  la confianza depositada en mí para formar parte del equipo de profesionales del gabinete. Prometo dar lo mejor de mí.